El poderoso sismo de magnitud 7.8 que sacudió la región fronteriza entre Turquía y Siria el 5 de febrero de 2023, causó la muerte de al menos 1.939 personas y dejó a miles de personas sin hogar.
El terremoto, que tuvo su epicentro en la ciudad turca de
Sivrice, a unos 100 kilómetros de la costa mediterránea, provocó una serie de
réplicas y generó una fuerte ola de tsunami que golpeó las costas turcas.
La mayoría de las víctimas fueron registradas en la
provincia turca de Elazig, donde la mayoría de los edificios y estructuras se
colapsaron y muchos barrios resultaron completamente destruidos.
Las autoridades turcas y sirias han trabajado juntas para
responder a la crisis y brindar ayuda a las personas afectadas por el
terremoto. Se han enviado equipos de búsqueda y rescate para encontrar a las
personas atrapadas en los escombros y se ha establecido un centro de acogida
para las personas desplazadas.
El Gobierno turco ha declarado tres días de luto nacional y
ha pedido ayuda internacional para responder a la emergencia. Muchos países y
organizaciones internacionales han respondido ofreciendo ayuda humanitaria y
financiera para apoyar a las personas afectadas por el terremoto.
La comunidad internacional se une en oración por las
víctimas y sus familias, y se espera que las autoridades continuen trabajando
juntas para brindar la ayuda necesaria a todos aquellos afectados por este
trágico evento.